2013 Año sin Imposibles

                                                        

El temor es uno de los mayores enemigos de la fe. El temor, y el miedo, siembran la duda, y la duda elimina la fe. Hoy en muchas partes del mundo se percibe la duda y la incertidumbre del 2013. Es más creo que casi nadie cree que pueda venir algo bueno este próximo año. Muchos apuestan más por un mal desenlace causado por la crisis, ya que cada día afecta más globalmente. Y surge el temor, y nos hace dudar y nos hace pensar: ¿Será que las cosas nunca van a cambiar? ¿Será que al final todo se va a ir al garete? El temor se vuelve grande. Las expectativas de la gente son más catastróficas que benéficas. Para muchos se hace todo imposible. Tal vez muchos tengan la razón en esto: que las cosas parecen cada vez más imposibles para todos; pero, ¿y Dios pensará Igual que nosotros? ¿será que ya todo se le fue de las manos?

¿Cuántos tienen temor por la incertidumbre del 2013? A mí, como me gustaría escuchar las mismas palabras audibles que le dijo el Ángel Gabriel a María cuando le anunció que iba a concebir del Espíritu Santo a Jesús. “porque Nada hay imposible para Dios”  

¿Como podríamos marcar este año que está acabando? Algunos dirían que les fue mal, que fue un año complicado, duro y lleno de baches, de recortes, de pérdidas; simplemente malo. Otros, y tal vez de estos muy pocos podrían decir, que este año fue un buen año. Pero ¿podríamos estar expectantes del año próximo de que pueda ser un año sin imposibles?

Este Año para nosotros será un año de trabajo. Tenemos que trabajar. Para ver fruto hay que trabajar; así que, para aquellos que quieran ver este año diferente, hay que trabajar.

Mucho de lo que define nuestra vida, es el contexto, y las circunstancias. Todo lo que circula a nuestro alrededor es lo que define nuestra vida; así que, si lo que circula a tu alrededor no es precisamente Dios y la fe en Dios, entonces sabrás qué es lo que va a definir tu vida de aquí en adelante. Aunque vivimos en este mundo de muchas y muy variadas circunstancias difíciles y adversas, especialmente ahora en estos tiempos, tenemos algo poderoso que Cristo nos dejó; La palabra de Dios, por medio de la cual desarrollamos la fe. Nuestra fe se fortalece por medio de su palabra para cualquier situación si lo permitimos. Dios tiene un año diferente para todos. Un nuevo año de retomar las promesas y victorias que ha preparado. Un año de aumentar la fe para ver aquello que aún no se ve realizado. Recuerde que la Biblia dice que Dios llama las cosas que no son como fueran, y lo mejor de todo es que suceden. Así que prepárese para este 2013 sin imposibles; “porque nada hay imposible para Dios”

1 Reyes 17:8-13

Vino luego a él palabra de Jehová, diciendo: Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado orden allí a una mujer viuda que te sustente. Entonces él se levantó y se fue a Sarepta. Y cuando llegó a la puerta de la ciudad, he aquí una mujer viuda que estaba allí recogiendo leña; y él la llamó, y le dijo: Te ruego que me traigas un poco de agua en un vaso, para que beba. Y yendo ella para traérsela, él la volvió a llamar, y le dijo: Te ruego que me traigas también un bocado de pan en tu mano. Y ella respondió: Vive Jehová tu Dios, que no tengo pan cocido; solamente un puñado de harina tengo en la tinaja, y un poco de aceite en una vasija; y ahora recogía dos leños, para entrar y prepararlo para mí y para mi hijo, para que lo comamos, y nos dejemos morir. Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como has dicho; pero hazme a mí primero de ello una pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y tráemela; y después harás para ti y para tu hijo.

Esta historia nos habla de una mujer que estaba viviendo circunstancias difíciles, como muchos de nosotros hemos pasado en algún punto de nuestra vida o estamos pasando; y lo que iba a hacer era usar lo último que tenía. Es como cuando se te ha acabado la paga del mes, y solamente te quedan unos cuantos euros, usas esos pocos euros para ese último día; pero, a partir de allí te queda solamente ver lo que va a suceder. La diferencia la hará la expectativa que tengas. Para ella su vida ya había terminado, su expectativa era dejarse morir. Las fuerzas para seguir luchando por ella misma y por su hijo se apartaron de su mente y de su corazón. La última pisca de harina suficiente para hacerse un pan y ese poquito de aceite para ella era como esos cuantos euros para nosotros hoy en día. O quizás también la ultima reserva de la despensa que tal vez será algo similar. El último huevo, el último vasito de arroz o de habichuelas, o de garbanzo; o quizás, la última patata. Porque ya todo se agotó. ¿Cual será, o u cual sería, o cual ha sido tu expectativa en ese momento? En esos momentos parece que se cierra el mundo para muchos: se ve en el telediario, cada día se viene abajo mucha gente por la crisis, algunos se suicidad, otros cometen locuras, otros se hunden en depresiones, otros matan incluso a sus hijos etc. porque parece que el mundo ya se vino encima. Tal parece que se cumple lo que dice la Biblia: “no hay quien busque a Dios” si tan solo conocieran lo que Dice la Biblia, que Dios es galardonador de los que le buscan. Ese es precisamente una buen parte del trabajo que tenemos por delante para este 2013. ¿Queremos ver frutos? “hay que trabajar”

Muchos, alguna vez nos hemos sentido así; parece que todo está perdido. Algo no ha salido bien, y está todo funcionando mal; ya no tenemos nada de que echar mano, y parece que todo se ha venido abajo. Trabaja en la fe y en el anhelo de buscar a Dios; que nunca se te acabe eso.

Si trabajas en la fe y en el anhelo de buscar a Dios, la chispa se enciende porque esperamos ver algo nuevo de parte de Dios, su palabra dice que Dios tiene misericordias nuevas cada mañana. La mañana del 1º de enero no será la excepción, y todos los días y todos los mese del año. Y este nuevo año no será la excepción. “Porque nada hay imposible para Dios”

Esta mujer viuda representa la condición de muchas personas que dejan de luchar por salir adelante. Aquellas que se hunden en sus malas expectativas. Cuando las cosas van mal y dejamos de luchar, nos cansamos, nos debilitamos, perdemos el ánimo, perdemos la esperanza, las expectativas. No pierdas nada de esto. No podemos empezar un año nuevo con la mentalidad de que las cosas van a seguir igual de mal o peores. Lo que pasó es que esta mujer se estaba dejando morir antes de que llegara el profeta por que pensaba que todo iba a seguir igual en su vida. Creía que nada iba a cambiar y que seguiría teniendo escasez, porque esa era la realidad en esa tierra. Ese es el problema de ser tan realistas. Es cierto, no podemos negar la cruda realidad de la falta de trabajo, de que cada día va en aumento el paro, de que los pronósticos este año siguen siendo malos, pero la diferencia será tu expectativa. ¿cuál será? ¿Realismo, o esperanza?

Marcos 5:21-34

Pasando otra vez Jesús en una barca a la otra orilla, se reunió alrededor de él una gran multitud; y él estaba junto al mar. Y vino uno de los principales de la sinagoga, llamado Jairo; y luego que le vio, se postró a sus pies, y le rogaba mucho, diciendo: Mi hija está agonizando; ven y pon las manos sobre ella para que sea salva, y vivirá. Fue, pues, con él; y le seguía una gran multitud, y le apretaban. Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva. Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote. Luego Jesús, conociendo en sí mismo el poder que había salido de él, volviéndose a la multitud, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos? Sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quién me ha tocado?  Pero él miraba alrededor para ver quién había hecho esto. Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad. Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote.

Había mucha gente queriendo saludar y tocar a Jesús, pero había una mujer que tenía una enfermedad por 12 años, esa enfermedad era denigrante según la ley. Era una mujer rechazada, e inmunda, y se gastó todo lo que tenía en médicos y no mejoraba. Esta mujer había invertido todo su dinero, se le acabó pero algo había dentro de ella; esperanza. Otra expectativa. Una mirada a la persona correcta; a un hecho no visto pero que se hizo realidad. Veía la esperanza de creer en un milagro, la esperanza de ver más allá de su cruda realidad. Qué más le quedaba. Invirtió todo y con nada sanaba. ella dijo “Voy a ir a buscar a Jesús y si tan solo toco el borde de su manto seré sana”. 

Ella es muy diferente a la viuda de Sarepta porque habiéndolo gastado todo ella pensó: “Aquí todavía hay algo, no tengo dinero, no tengo nada pero si toco el borde de su manto seré sana”

Se abrió camino entre la multitud, entre todas las personas que estaban con Jesús, e hizo algo diferente a los demás, se propuso un reto: tocar aunque fuera el borde del manto que llevaba Jesús. Esta mujer llevaba algo en ella capaz de sacar de Jesús un milagro. Fe, esperanza, expectativa.

Jesús ase día en ese momento no estaba predicando, ni sanando; había llegado a la otra orilla cuando de repente lo rodeó una gran multitud allí junto al mar; y de pronto llegó uno d los principales de la sinagoga a rogarle que fuera a sanar a su Hija; y cuando iba caminando hacia la casa del este hombre la mujer con flujo le vio y su expectativa cambió en ese momento. Y pudo sacar un milagro.

Lo que va a determinar algo excelente para tu vida para este año es la expectativa, tu fe y tu determinación de Acercarte a Jesús

La fe libera el poder que hay en él. Por que cuando hay una fe tan grande entonces lo único que se necesita es creer que de su presencia va a salir poder; pero es necesario acercarse a él también. Tienes trabajo.

CONCLUSIÓN: Quieres ver frutos este año, trabaja en tu relación y entrega a Dios. Eso va aumentar tu fe. Algunos pasamos pruebas difíciles años pasados, tal vez este que termina; pero, este año que comienza será un año sin Imposibles, expectantes de que Dios nos va a sorprender. Haz como esta mujer que se abrió paso entre la multitud; si es necesario, ábrete paso entre la multitud de obstáculos que haya entre ti y Jesús. Tu fe sacará lo que Jesús tiene para tu vida, no importa las circunstancias de alrededor. Tenemos un Dios grande que llama las cosas que no son como si fuesen. Esos son lo milagros que él hace. Cuando hay oscuridad es la oportunidad para dejar que su luz brille a nuestro favor. Este será un año sin imposibles. “porque nada hay imposible para Dios” Amén.